Ando medio loca entre el trabajo, la casa y organizar el cumple, con la ayuda de Marta, la madrina, experta en fiestas infantiles. Pero estos días Manuel cambia tan deprisa que temo olvidarme si dejo pasar más días.
Es un terremoto, creo que ya lo he dicho. Se pone de pie y camina agarrado de los muebles y de cualquier cosa que pilla. Cada vez lo hace mejor y se cae menos.
Domina el gateo a la perfección. Tanto que sube las escaleras del tobogán él solito, y una vez arriba se lanza boca abajo riendo como un loco.
En el parque se ensucia más que ningún otro niño, y se niega a sentarse tranquilamente a jugar con la arrena. Prefiere explorar, subir, bajar, su curiosidad es insaciable... me tiene agotada!
Merienda fatal casi siempre, pero después parece que tiene hambre y se desquita comiendo arena... me pone negra
Ha empezado a masticar y le encanta. Se pirra por el jamón york, el pavo y la tortilla francesa. Por contra empieza a rechazar el puré. Quiere probar todo lo que comemos los mayores.
Ayer probó los gusanitos en el parque con su Nana (la abuela Concha, que ahora ha decidido cambiarse el nombre), y le vuelven loco.
Dice papapapa, titititti, cacacaca. Pero no dice Mamá. Desagradecido!
Se queda frito sin rechistar a eso de las nueve y media y duerme casi siempre de un tirón. Amanece alrededor de las ocho, aunque tiene días inspirados en los que aguanta hasta las nueve y media. Casi nunca coincide en fin de semana... Esos días su papá le quiere mucho más...
Tiene vocación de escalador y se quiere subir a todos los muebles, aunque por suerte todavía no lo consigue.
Ha aprendido a abrir cajones y ayer se pilló los dedos por primera vez con uno. Su padre dice que se tiene que pillar muchas veces y así dejará de hacerlo, pero yo lo dudo.
Le encanta que le lean cuentos, especialmente los que tienen ventanitas. La tía Catia le trajo el otro día uno muy bonito y lo mira con verdadera devoción.
Dá muy pocos abracitos y "muás", y ya casi nunca quiere estar en brazos. Eso me pone triste, pero es inevitable, ¡se está haciendo mayor!
5 comentarios:
¡Madre mia que terremoto!
Me recuerda muchisimo a mi sobrino Hugo y si es como el preparate porque esto solo es el principio (ji,ji,ji).
PD: Cuando puedas pasate por mi blog, te he dejado un regalito = )
ai Manuelllllll eres un bixoooooo jajajajaja yo creo q estan todos asi!! al menos los q van cerca del año!!!! Alba tb se sube en todas partes,baja y sube el escalon de la cocina mejor k yo jajaja y ya da pasos sola,se mueve d un lado a otro andando solita pero me da un miedooooooooooooo horrible!!! y mria x donde hoy casi se pilla los dedos tb!!! esk no paran!!!! un besazoooo
Queridísima Alejandra:
No sabía que tuvieras un blog, pero si te gusta escribir y compartir tus experiencias me parece una idea genial que lo hagas en la bloggosfera.
Ya he visto que te has dado de alta como seguidora del mío. Millones de gracias. Te linkeo inmediatamente.
Un beso fuerte
Inma
Manuel está echo un bichillo!!! tu marido tiene razón cuando se vuelva a pillar los dedos no lo hace mas o por lo menos con mas cuidado :)
Los niños pasan etapas, Aitana antes no daba ni un beso y ahora es un chupachus de mi cara
Besos
Que lindo debe sentirse ser mamá...yo estoy en eso...me encanta tu blog.
Un beso
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